Beneficios de la danza en los niños
Distintos estudios y pruebas realizados por universidades y revistas de todo el mundo han demostrado que los niños que practican el baile son más felices. Éstas investigaciones constatan que no sólo mejoran la salud física, sino que aportan innumerables beneficios a nivel emocional, disminuyendo niveles de estrés y ansiedad, y aumentando la autoestima, concentración, equilibrio y estado de ánimo.
Seguro que en infinidad de ocasiones habréis leído o escuchado la infinidad de beneficios que aportan las artes escénicas en los más pequeños. El baile o la música son formas de expresión que nos hacen sentir bien, alegres, deshinibidos y juegan un papel fundamental en los niños puesto que les ayuda a mejorar su proceso de maduración interna y emocional y promueve un mayor nivel de bienestar.
Pues bien, estos datos han sido demostrados científicamente a través de distintos estudios realizados en prestigiosas universidades y revistas del mundo. Todos coinciden en el mismo resultado: El baile y la música hacen a los niños (y adultos) más felices.
La revista Archives of Pediatrics & Adolescent Medicine analizó a 112 jóvenes con problemas de salud físico y emocional. La mitad de ellos asistió a clases de baile semanalmente. El estudio dio como resultado que esta mitad no sólo mejoró su estado de salud física, sino que su estado emocional también cambió radicalmente, disminuyendo problemas de depresión y ansiedad.
ambién ha realizado un estudio similar la Universidad de Vigo, que concluye que alumnos de Primaria que practican danza dicen sentirse más satisfechos, con mayor autoestima, y creatividad que compañeros que optan por otras actividades físicas. El estudio, realizado a 74 jóvenes constata que la danza aporta a los niños mayores niveles de felicidad, autoestima y seguridad en sí mismos, notándose más bajos el estrés y la ansiedad.
En otro artículo recientemente publicado en la revista Sportis con los resultados de este estudio, los autores aluden a la “capacidad motivadora” de la música y el baile como “factor determinante” en los niveles de felicidad de los alumnos.
Los mismos estudios han realizado universidades como Universidad de Derby (Reino Unido), Universidad de Nueva York o en la Universidad de Öbrero (Suecia). En todas se ha demostrado que el estado de ánimo de las personas que bailaban, ya fueran adultos o niños, mejoraron notablemente.
También en ESAEM se ha experimentado momentos especialmente motivadores y que han cautivado a cientos de niños y jóvenes con el baile. Y no hablamos de sus alumnos, que de por sí, ya se muestran felices de cursar sus estudios de artes escénicas en el centro, hablamos de alumnos externos a ESAEM, procedentes de todos los puntos del país que asisten al Campamento de Verano de Artes Escénicas que todos los años (durante el mes de julio) se lleva a cabo en la escuela. Se trata de una actividad con la, a la vez que disfrutan de sus vacaciones, los jóvenes se ponen en contacto (algunos por primera vez en su vida) con el arte escénico, sumergiéndose en un entorno artístico incluyendo baile (hip hop, jazz, ballet, flamenco, contemporáneo,…), teatro, musicales, canto, lucha escénica, etc.
El resultado siempre es más que bueno, tanto alumnos como padres y madres relatan lo positivo de la actividad. Expresiones como “esto ha sido espectacular”, “maravilloso” “ha sido un sueño”, “nunca he vivido algo así” o “quiero volver y repetirlo mil veces más” , se han podido escuchar por parte de sus protagonistas, algo que demuestra que sólo una temporada de 15 días o un mes completo de danza, canto e interpretación puede hacer cambiar a mejor las emociones de muchos niños y niñas.
En definitiva, las personas que conviven con la música, el ritmo y el movimiento de forma habitual, tienen un estado mental mucho más positivo, tienen más autoestima, prestan más atención y rapidez en el trabajo y estudios, mejoran el sistema motor y equilibrio de los más pequeños y reduce el nivel de estrés y ansiedad. Factores que hacen sin duda que los que bailen sean más felices.